Sinónimos de tenso

Sé flexible como un junco, no tieso como un ciprés

Esa incertidumbre relativa sobre el acontecer histórico futuro quiebra el marco rígido e inflexible de las predicciones necesarias para abrirnos un horizonte de alternativas y de posibilidades quizás prometedoras. Pero ese horizonte adolece de una debilidad inevitable: su irreparable precariedad

La bestia ya se había convertido en carroña. Estaba muerto, rígido y helado, y no se podía hacer nada por él.

Quizás Dios perdone tus pecados, pero tu sistema nervioso no lo hará

La cibernética procura hallar los elementos comunes al funcionamiento de las máquinas automáticas y al sistema nervioso del hombre, y desarrollar una teoría que abarque todo el campo del control y de la comunicación en las máquinas y en los organismos vivientes.

Dios nos hizo para Él, y nuestro corazón estará inquieto hasta que no descanse en Él

Sobre la superficie de una corriente rápida es imposible distinguir los reflejos, tanto próximos como lejanos; aunque el agua no sea turbia, aunque la espuma no la cubra, la constante oscilación de la corriente, el inquieto burbujear del agua hacen que los reflejos sean deformes, imprecisos, incomprensibles.

El que tarda en airarse es grande de entendimiento; Más el que es impaciente de espíritu enaltece la necedad. (Proverbios 14:29: 9)

Sentía que se había producido en mi un gran cambio: mi emoción era mucho menos triste que el abatimiento en que estaba sumido hacía mucho tiempo. La tristeza de la separación se mezclaba con vagas pero dulces esperanzas, con la espera impaciente del peligro y con el sentimiento de una noble ambición. La noche se me hizo corta.

En mi última pelea había un montón de distracciones en mi mente... Ahora no hay distracciones. Sólo estoy preocupado por mi oponente. Estoy muy centrado en mi entrenamiento.

Sólo se había preocupado por las cosas terrenales, por las pequeñas cosas pasajeras de la vida, olvidando las que llevan hacia la eternidad, las que unen los dos extremos del golfo y hacen de la muerte el paso de un mundo al otro, del amanecer al pleno día.

Aquí estás, ombú gigante a la orilla del camino, indicando al peregrino no siga más adelante en la llanura sin fin. (...) Ese destino te espera, árbol, cuya vista asombra, que al caminante das sombra sin dar al rancho madera, ni al fuego una astilla dar; recorrerás el desierto cual mensajero de vida, y, tu misión concluida, caerás cual cadáver yerto bajo el pino secular.