Sinónimos de rendido

La música es un amante dócil y obediente que se somete a todos los caprichos, como la odalisca que para complacer a su señor le ciñe el cuello con el collar divino de sus brazos, o guarda reposa en actitud discreta refrescando la atmósfera con su abanico.

El príncipe puede matar un millar de dragones, pero no puede destruir castillos o destronar reyes. No va con su carácter. Es un hijo obediente que trata, ¡Ay de él!, de ser digno del hombre al que llama su padre.

Un corazón herido cae sumiso sobre una flor más bella que el paraíso, las nupcias de dos bocas, toda una vida que la llama invisible muere encendida.

Pasó un ministro del emperador y le dijo a Diógenes: ¡Ay, Diógenes! Si aprendieras a ser más sumiso y a adular más al emperador, no tendrías que comer tantas lentejas. Diógenes contestó: Si tú aprendieras a comer lentejas no tendrías que ser sumiso y adular tanto al emperador

Una vez que has entregado el espíritu, todo se sigue con absoluta certeza, aun en medio del caos

Me alegró saber que él no se había percatado de qué había presentado una ponencia en la que teorizaba sobre cómo empezó el universo. No me hacía gracia la idea de ser entregado a la Inquisición como Galileo

La miré sin comprender, aunque como un nadador solitario y exhausto la verdad poco a poco se fue abriendo paso en el mar negro de mi ignorancia.

Dejaré que muera en mí el deseo de amar tus ojos dulces, porque nada te podré dar sino la pena de verme eternamente exhausto

Asegúrate de haber agotado todo lo que se comunica por medio de la inmovilidad y el silencio.

Cuando un hombre dice que ha agotado la vida, se sobreentiende siempre que es la vida la que le ha agotado a él.

Para ser trigo de Dios, molido por los dientes de las fieras y convertido en pan puro de Cristo

La arquitectura es un foco donde han convergido tres propósitos distintos (utilidad, construcción y belleza). Se han fundido en un sólo método; han llegado a un resultado único; sin embargo, se distinguen entre sí según su propia naturaleza por una profunda y constante disparidad

Otra victoria como ésta y estaré vencido

He tenido sueños y he tenido pesadillas, pero he vencido a mis pesadillas gracias a mis sueños

El Sur está cansado de arrastrar muertos a la orilla de las ciénagas de malaria, está cansado de soledad, cansado de cadenas, está cansado en su boca de las blasfemias de todas las razas que han gritado muerte con el eco de sus pozos, que han bebido la sangre de su corazón.

Conclusión es el lugar donde llegaste cansado de pensar.

El dibujo fatigado del verso que escribo es un mensaje que apenas descifro.

La arena del desierto es para el viajero fatigado lo mismo que la conversación incesante para el amante del silencio.

Julio. Tú quizá sueñas todavía con aquella antigua Iglesia en la que tú en compañía de algunos famélicos obispos hacías de ponttífice completamente inútil, sometido a la pobreza, al sudor, a los peligros y a mil inconvenientes.

Súbitamente empezó a pensarse que el hecho de que el gobierno hubiera quedado sometido al control de la mayoría hacía innecesario mantener sobre él cualquier limitación, por lo que cabía impunemente abandonar todas las salvaguardias constitucionales.

EL ALCALDE: Como empleado, digo. Como simple particular, sí, sin duda. Pero, como subordinado de la dirección del balneario, no puedes tener otra opinión que la de tus jefes.

La peor desdicha del trabajador es que el azar le depare el estar subordinado a un mal jefe.

Será un perpetuo esclavo quien no sabe contentarse con poco

El bueno será siempre libre aunque sea esclavo; y el malo será esclavo aunque sea rey.

Sólo está derrotado aquel que ha dejado de luchar

¿Que podía haber terminado de pie con Alí? Puede ser, pero ése era mi verdadero sueño y, por lógica, los sueños también a veces terminan mal. Fue mi pelea, aunque haya sido derrotado