Sinónimos de perplejidad

Aunque parezca una paradoja, no rara vez sucede que, aquéllos que se llaman a sí mismos hijos de la Iglesia, son precisamente los que mayor confusión siembran.

La amistad no es menos misteriosa que el amor o que cualquiera de las otras faces de esta confusión que es la vida.

El hombre que duda y teme en el momento de realizar el ideal que predicó y no tiene coraje para mantenerse en su puesto de peligro es un farsante.

Mi abuelo pedía en el testamento que, cuando fuera posible, se rehabilitara su nombre, para que quedara claro que no fue un traidor a la patria. Sin duda alguna, la figura de mi abuelo ha tenido mucho peso en mi vida.

La incertidumbre erosionaba sus pensamientos, y sentía la amargura que de la indecisión puede alimentar.

No hay hombre más infeliz que aquel para quien la indecisión se ha hecho costumbre

Sin vacilación profetizo la ruina a aquel Estado en el que la ley depende del poder del gobernante y no es ella misma quien gobierna.

Ahora bien, si hay algo en la vida humana que conviene afrontar con vacilación y que incluso se debe evitar, conjurar y mantener lejos por todos los medios, es sin duda la guerra,...

Y en este titubeo de aliento y agonía, cargo lleno de penas lo que apenas soporto. ¿No oyes caer las gotas de mi melancolía?.

La alondra me despierta con un tímido ensayo de canción balbuceante y un titubeo de sol en el ala inexperta.

Nunca me comprendía porque me gustaban demasiadas cosas y me confundo y desconcierto corriendo detrás de una estrella fugaz tras otra hasta que me hundo

Los días de mi infancia transcurrieron de asombro en asombro, de revelación en revelación. Nací en un medio rural y crecí frente a un horizonte de balidos y relinchos.

Gaviota, gaviota, blancura del lirio, aire y bailarina, gaviota de asombro

Una de las tragedias del hombre es la irresolución de su vida entre los dos polos del enamoramiento: la sensualidad y el amor.

El impacto y el dolor de una pesadilla puede ser mucho mayor que el de un puñetazo.

Sé que en mi partido hay gente que ha querido minimizar el impacto del 15-M, pero recuerdo la espontaneidad de la gente que se sentó a debatir en las plazas. Me recuerdo pensando con mi hijo por esas plazas que estaba lleno de hijos y nietos de socialistas, sentados. Recuerdo que pensé: por qué están sentados en plazas y no en nuestras asambleas socialistas.

Recuerda el asombro general ante la extrañeza de una noche de la que se hablaba como de algo que hay que fijar fuera de la muerte para más adelante poder contarlo a los niños. Y también que ella hubiera sido partidaria de ocultar aquella noche de verano, de convertirla en cenizas

Cuanto más larga es la ausencia más duradera es la extrañeza de volver.