Sinónimos de incurrir

Un error corriente que suelen cometer los diseñadores de cualquier cosa a prueba de tontos, es subestimar el ingenio de un tonto de remate.

Es humano cometer pecados; diabólico, persistir en ellos; cristiano, odiarlos; divino, perdonarlos

Traigo en una mano la rama de olivo y en la otra el arma de los que luchan por la libertad, no permitan que deje caer el olivo

Hay un lado de mí que da miedo cuando actúo, porque siempre he querido desarrollar un tipo de método. Cuando la gente viene a mí y me dice que fui horrible en esto o en aquello, no quiero caer en siempre la misma interpretación. Pero, aunque parece mentira, he caído más de una vez

Nada importa saber o no la vida de cierta clase de hombres que todos sus trabajos y afanes los han contraído así mismo, y ni uno solo instante han concedido a los demás; pero la de los hombres públicos, sea cual fuere, debe siempre presentarse, o para que sirva de ejemplo que se emite, o de una lección que retraiga de incidir en sus defectos.

El pensamiento justo y la acción correcta por parte del pueblo no pueden dejar de incidir sobre el gobierno

Hay en cada hombre un animal encerrado en una prisión, como un forzado, y hay una puerta: si la entreabrimos, el animal se precipita fuera, como el forzado, encontrando su camino; entonces, y, provisionalmente, muere el hombre; la bestia se conduce como bestia, sin ningún cuidado de provocar la admiración poética del muerto.

Las armas más crueles resultan humanitarias si consiguen provocar una rápida victoria.

Creer que un enemigo débil no puede dañarnos es creer que una chispa no puede causar un incendio.

Me opongo a la violencia, porque cuando parece causar el bien éste sólo es temporal, el mal que causa es permanente.

Debe trabajar el hombre para ganarse su pan, pues la miseria en su afán ha de perseguirlo de mil modos, toca en la puerta de todos, y entra en la del haragán.

En su juventud, siendo todavía pobre y costándole trabajo ganarse el pan, prefería pasar hambre y andar con los vestidos rotos, si así salvaba un poco de independencia. No se vendió nunca por dinero ni por comodidades, nunca a mujeres ni a poderosos; más de cien veces tiró y apartó de sí lo que a los ojos de todo el mundo constituía sus excelencias y ventajas para conservar en cambio su libertad.

Al hombre le cuesta muy poco esfuerzo atraerse la desgracia.

Tres son los medios de atraerse la ruina: las mujeres, el juego y solicitar ayuda de los expertos