Sinónimos de imperial

En la vida real no existen más que voluntades fuertes y voluntades débiles.

Sólo si se conoce la verdad del amor, que es la naturaleza real del Yo, se podrá desatar el intrincado nudo de la vida. Sólo si se alcanzan las alturas del amor, se logrará la liberación. Ésa es la esencia de todas las religiones.

Los hombres públicos están triplemente sometidos: al soberano de su estado, a la fama y a los negocios

Por último, no ha sido declarado ni por la Iglesia ni por el Papa mismo que él séa el soberano civil de todos los cristianos del mundo, y, por tanto, los cristianos no están obligados a reconocer su jurisdicción en manera de costumbres.

El ajedrez es un juego sin par; regio e imperial.

¡Y yo te amo, invierno! Yo te imagino viejo, yo te imagino sabio, con un divino cuerpo de mármol palpitante que arrastra como un manto regio el peso del Tiempo...Invierno, yo te amo y soy la primavera...Yo sonroso, tú nievas: tú porque todo sabes, yo porque todo sueño...

Una mosca, señor, puede picar a un caballo majestuoso y hacerlo estremecerse de dolor; pero la primera seguirá siendo nada más que un insecto, y el segundo, empero, un caballo.

El concepto de Queen es ser majestuoso y real. El glamour forma parte de nosotros, y pretendemos ser dandis.

Estuvo allí algún tiempo paseando mientras contemplaba el espléndido fulgor del cielo de poniente y se decía, como en otras muchas ocasiones, que estaba en el país de los atardeceres. Había algo en aquellos radiantes abismos de fuego que le desataba la imaginación; siempre descubría imágenes y promesas en aquel cielo.

Mátame, espléndido y sombrío amor, si ves perderse en mi alma la esperanza.

Ningun ser humano, por grande y poderoso que fuera, será tan libre como un pez.

Soy esclavo de un poder interior más poderoso que mi educación.

No seas jamás humilde con los soberbio, ni soberbio con los humildes.

No seas jamás humilde con los soberbio, ni soberbio con los humildes

La experiencia amorosa une indisolublemente lo simbólico (lo prohibido, discernible, pensable), lo imaginario (lo que el Yo representa para sustentarse y agrandarse) y lo real (ese imposible donde los afectos aspiran a todo y donde no hay nadie que tenga en cuenta el hecho de que yo no soy más que una parte).

Somos como el original real Madrid. Si seguimos jugando así entonces estoy seguro que ganaremos algo.

El pueblo es soberano y él sabrá investigar las operaciones de sus representantes

Leer es el único acto soberano que nos queda.

El ajedrez es un juego sin par; regio e imperial.

¡Y yo te amo, invierno! Yo te imagino viejo, yo te imagino sabio, con un divino cuerpo de mármol palpitante que arrastra como un manto regio el peso del Tiempo...Invierno, yo te amo y soy la primavera...Yo sonroso, tú nievas: tú porque todo sabes, yo porque todo sueño...

El concepto de Queen es ser majestuoso y real. El glamour forma parte de nosotros, y pretendemos ser dandis.

Una mosca, señor, puede picar a un caballo majestuoso y hacerlo estremecerse de dolor; pero la primera seguirá siendo nada más que un insecto, y el segundo, empero, un caballo.

Repitió la lista, enumerando en voz baja todas las debilidades, los defectos, los errores y los males que lo atormentaban. Los confesó todos. En un prolongado y espléndido reconocimiento de sus faltas, se desnudó ante Dios sin ocultar nada.

Mátame, espléndido y sombrío amor, si ves perderse en mi alma la esperanza.

Hasta el más poderoso de los seres humanos tiene una esfera de fuerza limitada. Sácalo de esa esfera y atráelo a la tuya; su fuerza se disipará.

Ser rico y poderoso no excluye ser amado y admirado mientras no se den muestras de un talante egoísta y tiránico.

No seas jamás humilde con los soberbio, ni soberbio con los humildes.

Tango fatal, soberbio y bruto. Notas arrastradas, perezosamente, en un teclado gangoso. Tango severo y triste. Tango de amenaza. Baile de amor y muerte.