Sinónimos de hinchar

Y de nuevo volvió a sentir que la vida volvía a tener suficiente fuerza para arrastrarla y hacerle reemprender sus tareas, de la misma manera que el marinero ve, no sin cierto tedio, cómo el viento vuelve a henchir su vela pero no siente el deseo de irse otra vez, y piensa que si el barco se hundiera, bajaría con él girando y girando hasta encontrar descanso en el fondo del mar.

Cuando un amigo se va, queda un terreno baldío que quiere el tiempo llenar con las piedras del hastío.

No puede un viejo solo llenar toda una casa, un rincón de los campos, una granja. No puede. Así un anciano guarda la casa solitaria, en la noche de invierno. Y está solo. Está solo.

Estoy perdido para el mundo, aunque mi reino sean todos los mundos posibles, porque yo soy el testigo de mi propia creación. Mi creación es mi pasión. Por eso hago soplar los vientos para que den testimonio de mis llamas.

La mayoría de la gente no entiende cómo la otra parte se puede soplar la nariz de una manera distinta a la suya.

Y de nuevo volvió a sentir que la vida volvía a tener suficiente fuerza para arrastrarla y hacerle reemprender sus tareas, de la misma manera que el marinero ve, no sin cierto tedio, cómo el viento vuelve a henchir su vela pero no siente el deseo de irse otra vez, y piensa que si el barco se hundiera, bajaría con él girando y girando hasta encontrar descanso en el fondo del mar.

La experiencia humana sólo existe en el momento presente. El pasado existe como memoria, y para recordarlo tenemos que reexperimentarlo de alguna manera en el presente. El futuro existe como expectativa o fantasía, también creado en el presente. El anclaje nos permite aumentar nuestra libertad emocional escapando de la tiranía de experiencias pasadas negativas y creando un futuro más positivo.

Partir el dinero entre dos enamorados equivale a aumentar su amor, recibirlo uno de otro equivale a matarlo.

No se puede exagerar cuando se afirma que en sustancia el texto de la Biblia es seguro: Esto sucede especialmente con relación al Nuevo Testamento.

No hay que exagerar nada, ni la modestia

La elocuencia es el arte de abultar las pequeñas cosas y disminuir las grandes.

Todo el mundo dice que nuestros líderes local es son elegidos por las masas. ¿Pero por qué los funcionarios siguen gastándose todo el dinero de sus amos? Nosotros, el pueblo llano, sudamos sangre como si fuéramos bestias de carga, sólo para que los oficiales corruptos y codiciosos puedan engordar y no hacer nada.

Codelco es como una vaca fina holandesa que produce muchos litros de leche, pero hay una teta lateral que sirve para engordar terneritos ajenos

La ciencia social clásica, puede decirse en homenaje a ella, es, entre otras cosas, un intento para aumentar las probabilidades de que puedan ser correctas nuestras conjeturas sobre materias importantes.

Los jóvenes deben esforzarse en aumentar siempre su determinación y su valentía. Esto sólo podrá hacerse cuando la valentía esté enraizada en el corazón. Cuando el sable está roto, hay que atacar con las manos. Cuando las manos están amputadas, hay que servirse de los hombros. Cuando los hombros están cortados, hay que morder el cuello de diez o hasta de quince enemigo. Esto es realmente valentía.

Que cada uno se contente con ser honesto, quiero decir con cumplir su deber y no fastidiar al prójimo, y entonces todas las utopías virtuosas se verán rápidamente rebasadas.

El arte de dirigir consiste en saber cuando hay que abandonar la batuta para no molestar a la orquesta.

No quisiera molestar gratuitamente a nadie, pero la verdad es que, como la mayoría de los catalanes, aprecio más a Cataluña que al tripartito.

Y aunque aceptar la protección de los poderosos a menudo significa también atraerse conflictos, ella jamás cometía el menor desliz de esa clase, pues no permitía que nadie a su servicio hiciera nada que pudiera disgustar a otros.

Métense a querer dar gusto a todos, que es imposible, y vienen a disgustar a todos, que es más fácil.

Soy muy consciente, y sobre todo, estoy muy tranquilo con lo que digo, se que puedo enfadar a algunos y hacer feliz a otros, pero es que el comunicador está obligado a ir con la verdad por delante, con su verdad

Los verdaderos amigos se tienen que enfadar de vez en cuando.

Las cartas de recomendación son las que se entregan a un inoportuno para que vaya a importunar a otro.

¡Qué barbaridá, cómo los hace laburar el Profe! Hace cansar hasta a los conitos...

Lo más bonito que hay es una flor cuando sonríe desde lo alto de un fusil sin munición; que la belleza es algo que puede cansar si se consume el mar; que la belleza a mi ciudad vendrá viviendo en paz

Creo que me reservo el derecho a hablar sobre mi sexualidad... yo tampoco me puedo irritar y dejar que esto me toque las narices, o reírme de eso.

Tenía capacidad para sorprender, como todos los imbéciles mayúsculos, y por supuesto para irritar de nuevo en un solo segundo.

El secreto de aburrir a la gente consiste en decirlo todo.

Los sabios aceptaron con reconocimiento y pasaban el resto de sus vidas en asimilar ideas de séptima mano, dormir buenas siestas y aburrir a sus alumnos, que no dejaban de bostezar, con la palabrería anémica y libresca que ellos llamaban sabiduría.

Nuestra tarea consiste en animar a cristianos y no cristianos a realizar obras de amor. Y cada obra de amor, hecha de todo corazón, acerca a las personas a Dios.

La modestia es el arte de animar a la gente a que se encuentren por si mismos cuan maravilloso es uno.

La probabilidad de perder en la lucha no debe disuadirnos de apoyar una causa que creemos que es justa.

La web es más una creación social que técnica. La diseñé para un efecto social —para ayudar a las personas que trabajan juntas— y no como un juguete técnico. El objetivo último de la web es apoyar y mejorar nuestra existencia en la telaraña mundial. Nos agrupamos en familias, asociaciones y empresas. Desarrollamos la confianza a grandes distancias, y la desconfianza a la vuelta de la esquina

Si alguna vez la vida te maltrata, acuérdate de mí, que no puede cansarse de esperar aquel que no se cansa de mirarte.

Reflexionar con calma antes de adoptar ninguna determinación, no cansarse nunca de obrar el bien, y tratar cada asunto según convenga.

Quien posea conocimientos especializados puede considerarlos como capital para envanecerse y despreciar a los demás.

Al hombre le ocurre lo mismo que al árbol. Cuanto más quiere elevarse hacia la altura y hacia la luz, tanto más fuertemente tienden sus raíces hacia la tierra, hacia abajo, hacia lo oscuro, lo profundo — hacia el mal.

Debe señalarse que los principios religiosos sufren una suerte de flujo y reflujo en la mente humana y que los hombres tienen una tendencia natural a elevarse de la idolatría al monoteísmo y a recaer de nuevo del monoteísmo en la idolatría.

Las pequeñas doctrinas humanas, que sólo tienden a enorgullecer y a magnificar a unos pocos, no deberían ser sustituidas por el credo redentor mundial de Cristo.