Sinónimos de grandiosidad

Mirara hacia donde mirara, ya fuera hacia la tierra durmiente o a las vastas regiones del espacio, la magnificencia del mundo estaba más allá de la mente humana, se advertía la sublimidad de Dios y la majestad de su presencia.

Esa marometa que da el chiquillo en el aire expresa en un solo acto toda la alegría y la magnificencia de vivir.

La soberbia no es grandeza sino hinchazón; y lo que está hinchado parece grande pero no está sano.

La grandeza de una nación depende de la grandeza de su líder, y el porvenir de un pueblo se decide por la clarividencia de su líder.

¿De qué sirve, joven, contar, si no es para borrar de la memoria todo lo que no sea el origen y el fin? Nada entre el origen y el fin, nada, una planicie, árida, la salina, entre él y yo, nada, la vastedad más inhóspita, entre el suicida y el sobreviviente.

La caridad es el océano de donde parten y adonde van a parar todas las otras virtudes

Qué inapropiado llamar Tierra a este planeta, cuando es evidente que debería llamarse océano

La ambición y la audacia vencen también, después de salvar infinidad de obstáculos.

Lo falso es susceptible de una infinidad de combinaciones; pero la verdad no tiene más que una manera de ser

Le dio al término completo un nuevo significado. Hizo que la palabra superestrella fuera inadecuada. Tenía un toque de realeza

Prefiero encontrar la explicación de algo a que la realeza de los persas venga a mis manos.

El viejo doctor fausto ve a la joven campesina dormida en el camino y ¡adiós sus libros, su conocimiento, su filosofía!

Preocúpate por la calidad, mucha gente no está preparada para un entorno donde la excelencia es lo que se espera

¿Quién no se ha sorprendido a sí mismo cien veces cometiendo una acción estúpida o vil, por la única razón de que 'no debe' cometerla? ¿Acaso no existe en nosotros una eterna inclinación, a despecho de la excelencia de nuestro juicio, a violar 'la ley' simplemente porque reconocemos que es la ley?.

Mirara hacia donde mirara, ya fuera hacia la tierra durmiente o a las vastas regiones del espacio, la magnificencia del mundo estaba más allá de la mente humana, se advertía la sublimidad de Dios y la majestad de su presencia.

¡Qué sublimidad en sus máximas! ¡Qué profunda sabiduría en sus discursos! ¡Qué presencia de mente, qué sutileza, qué idoneidad, en sus respuestas! ¡Qué grande el dominio sobre sus pasiones! ¿Dónde está el Hombre, dónde el filósofo, que pudiera vivir así y morir así, sin debilidad, y sin ostentación?

Su majestad es una señorita muy linda, pero no tiene mucho que decir.

La majestad y la grandeza no está en ser uno señor, sino en que por tal le tengan.

Hagamos una guerra de virtudes si es posible, procurando cada cual superar al enemigo en honradez, buena fe, magnanimidad

La magnanimidad o grandeza de ánimo, según el nombre nos lo muestra, también consiste en cosas grandes.