Sinónimos de celestial

Jesús, el dulce, viene... celeste primavera que la nieve, al pasar, blanda, deshace, y deja atrás eterna calma... ¡Señor del cielo, nace esta vez en mi alma!

Esta fresa, me la dieron esta mañana, me hace tan feliz que oí al espacio celeste decir la cosa más deliciosa que haya saboreado.

El ideal de producir el paraíso terrenal puede parecer magnífico, porque se desea que todo sea perfecto y todos vivan en la felicidad, pero en realidad es un ideal mortal. Lo aprendimos a la fuerza. Comprendimos que el ideal democrático, que es mucho menos excitante que la perfección del paraíso, es digno de respeto y hay que defenderlo.

El hombre no es sino un animal más perfecto que los otros y que razona mejor

Soy simpatico la primera vez que se me trata, la segunda vez soy sencillamente delicioso

Es delicioso dar con alguien que acepte las pequeñas ironías como expresiones de la mayor seriedad.

¿Cómo decir este deseo del alma? Un deseo divino me devora; pretendo hablar, pero se rompe y llora esto que llevo adentro y no se calma

Juventud, divino tesoro, ¡ya te vas para no volver! Cuando quiero llorar, no lloro... y a veces lloro sin querer.

Lo bello es superior a lo sublime, porque es permanente y no sacia, mientras que lo sublime es relativo, pasajero y violento.

Es absolutamente más sublime que todo el mundo el alma que está unida a Dios.

No se sirva pues de ese elevado término de ideal cuando tenemos para eso, en el lenguaje habitual, la excelente expresión de mentira.

Enviar una carta es una excelente manera de trasladarse a otra parte sin mover nada, salvo el corazón.

La historia sería algo maravilloso si fuera cierta

Lo más maravilloso de los milagros es que a veces suceden.

La forma del proceso social de vida, o lo que es lo mismo, del proceso material de producción, sólo se despojará de su halo místico cuando ese proceso sea obra de hombres libremente socializados y puestos bajo su mando consciente y racional.

No sé soy creyente; cuando le preguntaban eso mismo a mi padre, él respondía, en broma, que era dudante. En lo que hace a mí mismo, no soy religioso. Tengo por ahí algún sarampión místico que repentinamente me inquieta.

Vaga y maravillosa es la visión que he conjurado en mi mente sobre la vida que se extienda desde esta sementera del sistema planetario para llegar a todos los rincones del infinito espacio sideral. Pero es un sueño muy remoto. Podría ser, por otra parte, que la destrucción de los marcianos sea sólo un intervalo de respiro. Quizá el futuro les pertenezca a ellos y no a nosotros.

Elegir es criticar y criticar es definir, a priori, en los términos más generales que es posible, la naturaleza esencial de lo que se trata de tal manera que es esta definición a priori la circunstancia, providencial puede decirse, a partir de la cual esa crítica es posible.

Lo peor no es cometer un error, sino tratar de justificarlo, en vez de aprovecharlo como aviso providencial de nuestra ligereza o ignorancia.

Es feo ser digno de castigo, pero poco glorioso castigar

¡Ay, amor! glorioso infierno y de infernales injurias, león de celosas furias, disfrazado de cordero.

En la grande prueba. El hombre congelado por el científico morirá. Su vuelo y desprendimiento espiritual será desde un principio hasta quedar fuera de su materia, la que muerta no será en putrefacción hasta el día del deshielo. En ese momento la descomposición será en el acto

El surrealismo no era para mí una estética, un movimiento de vanguardia más, sino algo que comprometía mi vida en una dirección espiritual y moral. No pueden ustedes imaginarse la lealtad que exigía el surrealismo en todos los aspectos.

En la música es acaso donde el alma se acerca más al gran fin por el que lucha cuando se siente inspirada por el sentimiento poético: la creación de la belleza sobrenatural

...ningún hombre puede saber infaliblemente, por razón natural, si otro ha tenido una revelación sobrenatural de la voluntad de Dios; tendrá sólo una creencia;...

Lo principal de un espectáculo es la coreografía, no el bailarín, porque si no se convierte en un divo

El atletismo vocal de un divo de ópera no tiene más importancia que el atletismo muscular de un héroe de halterofilia.